En un reciente desarrollo en la gestión pública de Nuevo León, los diputados locales han aprobado el Presupuesto 2025 del Congreso, justo antes de su reunión con la Tesorería General del Estado. Esta decisión no solo refleja el rumbo financiero que tomará el Poder Legislativo en el próximo ejercicio fiscal, sino que también pone en el centro del debate una propuesta de incremento casi del 100% en el presupuesto asignado a la Auditoría Superior del Estado (ASE). Este último aspecto ha generado controversia y diversas opiniones entre los legisladores.
Presupuesto del Congreso
En una reunión de la Comisión de Coordinación y Régimen Interno (COCRI), se estableció que el gasto corriente del Poder Legislativo para 2025 será de 513 millones de pesos, mientras que el gasto de capital alcanzará los 20 millones de pesos, sumando un total de 533 millones. Este monto representa un aumento del 7% en comparación con el ejercicio fiscal anterior. La justificación para este incremento se centra en la necesidad de mantener el aumento salarial a los empleados del Congreso, así como realizar adecuaciones necesarias en las instalaciones del edificio legislativo, que han mostrado signos de deterioro a lo largo del tiempo.
El coordinador del Partido Acción Nacional (PAN), Carlos de la Fuente, expresó que la decisión de aumentar el presupuesto es vital para atender los problemas de infraestructura del edificio del Congreso. Según sus declaraciones, el estado de las instalaciones ha generado preocupaciones sobre la funcionalidad y seguridad del espacio donde se llevan a cabo las sesiones legislativas. La necesidad de contar con un entorno adecuado para el trabajo de los legisladores es fundamental, y el presupuesto propuesto busca precisamente abordar estos desafíos.
Controversia sobre la Auditoría Superior
Sin embargo, la situación se complica con la propuesta de incrementar el presupuesto de la ASE, que había sido presentada con una justificación que proponía un gasto corriente de 611 millones 512 mil 761 pesos y un gasto de inversión de 58 millones de pesos. Esto llevaría el total del presupuesto de la ASE a 669 millones 512 mil 761 pesos para 2025, lo que representaría casi el doble de la cantidad aprobada para el año fiscal 2024.
Esta situación fue objeto de fuertes críticas por parte del Movimiento Ciudadano (MC), que señaló que un aumento de tal magnitud no estaba justificado y podría comprometer la transparencia y eficiencia del gasto público.
La votación para este presupuesto no logró el respaldo necesario, quedando en un empate de 20 votos a favor y 20 en contra, con una abstención. Esta situación dejó el presupuesto de la ASE en un limbo, lo que obligó a su devolución a la COCRI para un estudio más detallado. La intención es que los partidos PRI y PAN negocien con Morena y MC para alcanzar un consenso que permita la aprobación del presupuesto para la Auditoría Superior.
Comparativa con el Presupuesto Anterior
El contraste con el presupuesto del año anterior también es notable. En 2024, el Congreso local había aprobado un presupuesto de 494 millones de pesos, mientras que la ASE contaba con un presupuesto de 362 millones 171 mil 23 pesos. Este aumento drástico propuesto para 2025 ha suscitado cuestionamientos sobre las prioridades del gasto público en la región, así como la necesidad de una revisión exhaustiva de las metas y objetivos de la ASE.
En este contexto, la figura de la ASE se convierte en un tema central, ya que su papel es crucial para asegurar la rendición de cuentas y la transparencia en el manejo de los recursos públicos. El coordinador de MC, Miguel Ángel Flores, enfatizó la importancia de contar con una explicación clara de los motivos por los cuales la ASE solicita tal incremento en su presupuesto. Según Flores, es fundamental que un representante de la ASE asista al Congreso local y brinde detalles sobre las justificaciones y necesidades que sustentan esta propuesta, asegurando así que el proceso se lleve a cabo de manera transparente.
Perspectivas Futuras
La situación actual plantea un escenario complejo para la administración pública de Nuevo León, donde la negociación y el diálogo entre los diferentes partidos políticos serán fundamentales para lograr un presupuesto que responda a las necesidades de la población y garantice la eficacia en la gestión de recursos.
La devolución del presupuesto de la ASE a la COCRI marca el inicio de un proceso que requerirá de la voluntad política de todos los actores involucrados para llegar a un acuerdo que beneficie a la comunidad. Mientras tanto, la atención se centrará en las futuras discusiones en el Congreso y las posibles modificaciones que se puedan realizar al presupuesto propuesto.