El equipo de Adrián de la Garza, dirigido por Marcelo Segovia Páez, coordinador de la mesa de infraestructura y servicios públicos, ha iniciado un recorrido por diversas obras en proceso que quedarán pendientes de concluir al cierre de la presente administración como parte de la transición en el Gobierno de Monterrey,
Este esfuerzo es parte de la segunda etapa de la transición, en la que el equipo entrante busca conocer de primera mano el estado de los proyectos de infraestructura que heredarán.
Adrián de la Garza recibirá un Monterrey incompleto
Este martes, el coordinador de la mesa de infraestructura y servicios públicos recorrió varias zonas clave de la ciudad acompañado de otros funcionarios municipales.
Uno de los puntos más destacados de la jornada fue el paso a desnivel que se está construyendo en la intersección de Paseo de los Leones y Puerta de Hierro. Tras la inspección, se confirmó que esta obra no estará finalizada antes de que termine la gestión actual, lo que implica que la próxima administración, la de Adrián de la Garza, deberá concluirla.
Segovia Páez explicó que este paso a desnivel es solo una de las 40 obras inconclusas que el gobierno de Adrián de la Garza recibirá. Estas obras, muchas de ellas con una alta importancia para el desarrollo de la ciudad, requieren mucha atención para ser finalizadas de manera adecuada.
El coordinador también destacó la importancia de estas visitas físicas a las obras en proceso, pues considera que son un elemento clave para entender de manera más precisa los problemas y retrasos que enfrentan.
Prioridades para el futuro
Uno de los principales objetivos de la nueva administración será hacer un diagnóstico exhaustivo de todas las obras pendientes y definir cuáles requieren atención urgente y cuáles pueden esperar un poco más.
De acuerdo con Segovia Páez, la instrucción del alcalde electo, Adrián de la Garza, es clara: identificar aquellas intervenciones que son de prioridad inmediata, para darles seguimiento en cuanto se asuma el control del gobierno municipal.
La idea es aprovechar el periodo de transición para no solo recibir la información técnica y administrativa, sino también para hacer una planificación integral que permita avanzar en proyectos a corto, mediano y largo plazo.