En la reciente sesión solemne dedicada al Tercer Informe de Gobierno en Nuevo León, la ausencia del Gobernador Samuel García fue un punto de atención que no pasó desapercibido. En este contexto, la Presidenta del Congreso, Lorena de la Garza, ofreció un discurso contundente en respuesta a las afirmaciones del mandatario, subrayando que los resultados positivos que se pretenden destacar no son concretos ni tangibles. Según De la Garza, Samuel García no tiene base para presumir logros significativos en su gestión.
La diputada Lorena de la Garza enfatizó que los avances que ha experimentado Nuevo León a lo largo de su historia son el resultado del arduo trabajo y dedicación de sus ciudadanos, y no regalos otorgados por la administración actual. “Aquí nadie nos regaló nada. Todos hemos trabajado incansablemente desde nuestras posiciones para lograr que este gran estado avance”, afirmó con firmeza. A pesar de que Nuevo León se ha consolidado como un estado de vanguardia en diversos aspectos, De la Garza observó que, en los últimos años, el estado ha sido severamente afectado por una crisis política que ha obstaculizado el progreso en áreas cruciales como la economía y el bienestar social.
Necesidad de unión política
En su intervención, Lorena de la Garza enfatizó que, para que Nuevo León logre salir adelante, es fundamental contar con voluntad política genuina, así como respetar la división de poderes y garantizar un presupuesto que sea tanto transparente como legal. A su juicio, el gobierno de Samuel García no puede justificarse al afirmar que ha alcanzado logros palpables, ya que estos no se reflejan en la realidad que viven los ciudadanos, especialmente en temas tan delicados como la seguridad, la movilidad y la corrupción.
“¿Cómo es posible que se presuma la seguridad en Nuevo León cuando en realidad vivimos en uno de los estados más inseguros del país?”, cuestionó. Lorena de la Garza destacó que la violencia ha aumentado como resultado de una falta de experiencia y habilidades en la gobernanza. Además, dirigió sus críticas a la narrativa oficial que sostiene que se ha resuelto el problema de la movilidad en el estado. “¿Cómo pueden afirmar que la movilidad se ha mejorado cuando no hay suficientes camiones y la gente sigue enfrentando largas horas de trayecto para llegar a sus trabajos o escuelas?”, añadió.
Desafíos de corrupción y familiarísimo
Otro de los puntos críticos abordados por la presidenta del Congreso fue la supuesta incorruptibilidad del Gobernador. “¿Cómo pueden presumir de ser incorruptibles cuando hay evidencias de que el gobernador ha favorecido directamente a su familia con contratos y recursos públicos?”, manifestó. Estas afirmaciones resaltan un descontento generalizado hacia la gestión de García, que ha sido objeto de críticas por presuntos actos de nepotismo y corrupción.
Durante su discurso, Lorena de la Garza hizo un llamado a la unidad y la colaboración entre todos los actores políticos del estado. Instó al Gobernador y a las distintas fuerzas políticas en el Congreso a trabajar juntos por el bienestar de Nuevo León, dejando de lado los intereses personales y las agendas partidistas. “El interés de Nuevo León debe ser superior a cualquiera de nuestros proyectos individuales. Es crucial que aprovechemos lo mejor de cada grupo parlamentario y que dejemos de lado discusiones estériles para enfocarnos en lo que realmente se puede concretar”, aseguró.
Un camino hacia el cambio real
Lorena de la Garza también subrayó la importancia de desarrollar proyectos que sean reales y tangibles, instando a los políticos a dejar atrás la retórica vacía y las políticas de anuncios publicitarios. La presidenta del Congreso insistió en que el futuro de Nuevo León depende de acciones concretas que puedan transformar la vida de sus habitantes, no de promesas vacías.
Para concluir su mensaje, Lorena de la Garza expresó su apoyo a la propuesta de reconciliación promovida por la presidenta Claudia Sheinbaum. “Le tomo la palabra y ofrezco mi mejor disposición para colaborar en beneficio de nuestro estado”, reafirmó, destacando su compromiso con la transparencia, el diálogo y la cooperación conjunta para abordar los desafíos que enfrenta Nuevo León.
Así, el Tercer Informe de Gobierno, se convierte en un reflejo de las carencias y retos que aún persisten en Nuevo León, destacando la necesidad de un cambio real que beneficie a sus ciudadanos y recupere la confianza en sus líderes.
