El presidente de la Asociación de Alcaldes Metropolitana, y Alcalde de Monterrey, Adrián de la Garza, anunció que se están realizando modificaciones al Reglamento de Vialidad y Tránsito de la ciudad para hacer frente a los choques menores o “choques lamineros”, que históricamente han agravado el tráfico y la productividad en la ciudad. El objetivo es evitar que los vehículos involucrados en estos accidentes bloqueen la vialidad mientras esperan la llegada de los ajustadores de seguros o las autoridades de tránsito.
Obstrucción de vialidad por choques menores será sancionada
Una de las principales modificaciones que se está proponiendo es que, en el caso de choques menores, obstruir la vía será considerado una infracción en todo el área metropolitana de Monterrey. De la Garza explicó que esta medida será homologada con otros municipios metropolitanos para que se aplique de manera uniforme, ya que el tráfico en la ciudad no entiende de límites municipales.
“De nada serviría hacerlo en unos municipios y en otros no”, señaló el edil, destacando la importancia de que todos los municipios trabajen en conjunto para resolver este problema.
Automovilistas temen perder el respaldo de las aseguradoras
El problema detrás de esta obstrucción vial es el temor de los automovilistas de que, si mueven sus vehículos antes de que lleguen las aseguradoras o las autoridades de tránsito, estas no cubran los daños.
Según De la Garza, muchas personas creen que si mueven su vehículo, las aseguradoras podrían negarse a pagar los daños, ya que este sería considerado como un “cambio en el lugar de los hechos”.
Uso de tecnología para agilizar el proceso en choques menores
Para resolver este inconveniente, el alcalde propuso que tanto aseguradoras como automovilistas utilicen la tecnología disponible en la actualidad para registrar los daños y agilizar el proceso.
De la Garza sugirió que, en casos de daños menores, los conductores puedan documentar el estado de sus vehículos mediante dispositivos electrónicos (como teléfonos móviles) antes de moverlos, lo que permitiría que el proceso fuera más eficiente y que no se obstruyera la circulación.
Estas modificaciones al reglamento de tránsito aún están en proceso, pero se espera que las nuevas normas ayuden a reducir el caos vial y mejorar la eficiencia en la resolución de los accidentes menores en Monterrey y su área metropolitana.
